¿Por qué se llevan flores en carros durante la Semana Santa?

Durante la Semana Santa en Málaga, no solo procesionan las imágenes. También lo hacen las flores, aunque en su propio camino. Cada año, decenas de encargos salen desde floristerías como la nuestra rumbo a parroquias, casas de hermandad, comercios del centro o balcones familiares.

Muchas veces se entregan en carros cargados de centros florales y ramos devocionales que acompañan el paso de un trono o que adornan un rincón importante para una familia. No es raro ver a floristas empujando carritos por calles peatonales, sorteando el bullicio de procesiones y turistas, para llegar justo a tiempo antes de que “salga el Señor”.

Algunos encargos son más grandes: decoraciones para escaparates que quieren rendir homenaje a la Semana Santa desde lo comercial, pero con mucho respeto. Otros son más íntimos: un ramo para colocar al pie de una imagen en casa, o para ofrecer a una Virgen en la iglesia del barrio.

¿Dónde se llevan las flores?

Las flores llegan a muchos lugares, y cada uno tiene su historia:

Iglesias del centro, donde se preparan los altares y se recibe a las cofradías.

Balcones de vecinos, que se visten con claveles y ramas verdes para ver pasar el trono desde casa.

Locales y restaurantes, que también participan en la ambientación con centros florales a juego con los colores de la cofradía.

Casas de hermandad, donde las flores esperan su turno para formar parte del trono.

En muchos casos, somos testigos de momentos muy emotivos: cuando alguien encarga un ramo para un familiar que fue portador, para cumplir una promesa, o simplemente porque esa flor significa algo muy profundo para quien la ofrece.

Flores que acompañan a quienes acompañan

Y no podemos olvidarnos de quienes acompañan a las imágenes en la procesión: los nazarenos, los portadores, las camareras. Muchas veces vienen a nuestra floristería buscando un pequeño detalle floral para llevar en la mano, en la túnica o en el pecho.

Son gestos pequeños, pero con mucho sentido. Porque cuando uno forma parte de la procesión, también quiere llevar algo que represente su emoción.